La primera partida contó con trece participantes. Si alguno de los presentes hubiera prestado atención a este detalle, tal vez se hubieran podido tomar medidas, como forzar amistosamente a alguno de ellos a retirarse de la partida, o bien prescindir del árbitro, y completar catorce jugadores. Lamentablemente no fue así, y el mal fario se extendió a lo largo y ancho de la sala de juego durante todo el transcurso de una partida arbitrada por Joan López. Comodines sin marcar, coordenadas mal señaladas, la misma palabra inválida presentada por varios jugadores alejados entre sí, un dupmaster que se rebeló contra su creador, quien tuvo que continuar extrayendo manualmente letras de una bolsa durante dos turnos mientras mangoneaba a pelo la base de datos. Finalmente sólo hubo que lamentar un retraso de cinco rondas en la corrección al finalizar la partida, y una sangría de puntos terrible para todos los jugadores. Sin excepciones. Finalmente, José Fernández controló mejor que nadie los daños, seguido relativamente cerca de Juan Novoa y José Antonio Lozano (¡Jotas al poder!).
En la segunda partida tomó las riendas del arbitraje Wifredo Vellosillo, uno de los principales damnificados por la primera partida. Tomó cumplida venganza con una partida larga (23 rondas) y muy trabada, aunque el hecho de que los participantes ya fueran doce aplacó considerablemente los ánimos del cenizo que nos miraba mal, ya que dejó al grupo en paz, y se puso a perseguir sólo a un muy selecto y reducido número de jugadores. José Fernández dominó con un diferencial de ensueño, seguido por Juan Novoa, también con menos de 100 puntos, y tercero Joan López. De nuevo las Jotas copaban el podio. Las cosas se ponían muy pero que muy de cara para el bilbaíno, recientemente nombrado presidente honorario de la AJS (Asociación de Jirafas Scrabblistas).
Pablo Bach se puso a los mandos de la tercera partida. Todo el mundo estaba confiado en que tras dos partidas infernales, por fin veríamos la radiante luz del sol en un cielo límpido, claro y cristalino. Pues no. 25 rondas, un único scrabble por parte del Máster. No os dejéis engañar por la imagen beatífica del desarrollo final de la partida. Es totalmente engañosa. Y eso que la Q decidió quedarse tranquilita dentro del saco hasta el final, que si no, más de una desgracia hubiera podido desencadenarse. De nuevo José se hizo con la partida (tres de tres). Le acompañaron en puestos de honor Juan Carlos Ayala y Juan Novoa (su tercer podio de la noche). Tres Jotas en el podio de nuevo, y una cuarta, José Antonio Lozano, inmediatamente después.
En la clasificación final se han tenido en cuenta los dos mejores resultados de cada jugador, mediante la suma de los mejores diferenciales. Hasta cinco Jotas en las cinco primeras posiciones, con José Fernández como campeón absoluto e indiscutible, segunda plaza para Juan Novoa, y tercera para Joan López, que se hizo acreedor del galardón al mejor jugador en categoría B. Completó el palmarés Luisa López, ganadora de la categoría C. Los premios consisten en una inscripción gratuita para uno de los torneos que organizará el Club Atriles en el primer semestre del año que viene, y una taza con motivos de Scrabble.
Esperamos poder complementar esta (no tan mini)Crónica con material gráfico, y la subida a la página web de DupMaster del desarrollo de las partidas a la mayor brevedad posible. De momento, os mostramos el tablero final de las tres partidas. Quienes queráis recrearlas en casa más adelante, podéis dejar de leer aquí.
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